viernes, 28 de enero de 2011

NECESIDAD DEL ABRAZO

La necesidad del abrazo es algo evidente. No solo en nuestra sociedad, que es un asunto que se repite y repite, sino como humanidad. Para recuperar el sentido del SER HUMANOS. De que somos seres, y tenemos necesidades humanas, como es el contacto, el cariño, el sentirnos amados, el sentirnos queridos, protegidos. 


Según Rolando Toro "Todo cuerpo que no es acariciado empieza a morir. El contacto es una fuente de salud y es la acción terapéutica más importante... El contacto permite la conexión con la energía de la vida que es de naturaleza cósmica y cuya repercusión en las personas que participan tiene efectos múltiples, desde reacciones químicas y eléctricas de los neurotransmisores y procesos de conducción neurológica, hasta la fecundación de la vida con la vida"


A continuación voy a poner una parte de los antecedentes experimentales de otros autores y científicos que estudiamos. Son parte del fundamento de la teoría de Biodanza y que explica claramente la necesidad del contacto que tenemos, no solo las personas, sino los seres vivos. 


Para quien desee profundizar más, este fragmento está extraído del cuadernillo de Contacto y Caricias en las páginas 19-20. 



"Antecedentes Experimentales: 
Ø Harlow, H. Y Zimmermann, R.: “Development of Affectional Responses in Infant Monkeys”; Harlow, H. y Harlow, M.: “Social Deprivation in Monkeys”. Estas investigaciones demostraron que la estimulación táctil-cenestésica es importante para el desarrollo en crías de monos. Colocó estas crías con madres biológicas y madres sustitutas, inanimadas. Las madres sustitutas eran de dos tipos: una formada por un armazón de alambre y otra revestida con una piel. La madre de alambre estaba provista de biberones. El pequeño mono prefería permanecer el mayor tiempo posible en el regazo de la madre ‘peluda’. Los hijos criados con la madre de alambre tenían comportamientos visiblemente más neuróticos.

Experiencias posteriores confirmaron que, además de los contactos táctiles, los monos necesitaban una madre en movimiento. Otras experiencias demostraron que los pequeños monos que juegan con otros compañeros de su edad se desarrollan más saludables que aquellos que sólo tienen contacto con sus madres. Los que fueron cuidados sólo por su madre, sin otros compañeros, presentaban perturbaciones graves respecto al sexo y al juego. Los criados en total aislamiento presentaban desvíos en los comportamientos de juego, defensa y sexo. Las experiencias de Harlow demostraron la importancia de la estimulación táctil cenestésica con la madre y con otras criaturas de su edad. El seno materno no sólo es un medio de alimentación, sino también de estimulación táctil-cenestésica.

Ø Seymour Levine: “Infantil Experiencia and Resistance of Phisiological Stress”. Las investigaciones de Levine sobre resistencia al stress -en ratas acariciadas y no acariciadas en su primera infancia- tiene especial relevancia en nuestro estudio. Levine demostró -midiendo la actividad endocrina frente al stress- que las ratas que no han sido acariciadas o tocadas, en su infancia temprana, tienen una adaptación mucho más defectuosa a los estímulos nocivos.

Ø Margareth Ribble: “The rights of infants”. Los niños necesitan tres tipos de estimulación sensorial, más allá de la actividad nutritiva oral: estimulación táctil (contacto), cenestésica (movimiento) y auditiva. La estimulación táctil requiere contacto entre la madre y el niño. La autora destaca la importancia de acariciar y presionar suavemente (táctil), mecer levemente (cenestésico), conversar y cantar para el bebé (auditivo).

Ø R. A. Spitz: “The Psychogenic Diseases in Infancy”. Los síndromes clínicos que produce la carencia afectiva en la primera infancia, han sido estudiados y analizados por Spitz, el cual los divide en dos grupos:

-       Enfermedades psicotóxicas.
-       Enfermedades por deficiencia activa." 


Yo personalmente he podido comprobar esto en mi sesión mensual con los niños del colegio de Barcelona donde colaboro. La verdad es que en las sesiones de Biodanza no dejo de sorprenderme del real poder que tiene la música, el grupo, las consignas, las propuestas.. pero sobretodo, la voluntad de los participantes. La voluntad de disfrutar de la clase, que para ellos les viene como un regalo por buen comportamiento, el poder gozar de un rato de baile juntos... sin tener que hacer deberes o seguir con su rutina de aprendizaje cognitivo. 


En la pasada sesión del miércoles 26 de enero vi como el aprendizaje vivencial es tan importante cuanto el otro. 

La clase se realizó con niños de 8 a 11 años. Empezamos leyendo un cuento que hablaba sobre la escucha y en la parte verbal ellos me aportaron sus inquietudes en relación al cuento y sus pensamientos en relación a la escucha. Se dieron cuenta que cuando no escuchamos al otro no podemos participar de la conversación. Se dieron cuenta que se hace difícil entenderse cuando no estamos REALMENTE dispuestos a escuchar. Pero sobretodo, se dieron cuenta que no se escucha solo con las orejas, sino que se escucha también o mejor con el corazón. 

Casi al final de la vivencia, les propuse que realizaran abrazos de despedida. Para agradecer la presencia de sus compañeros y despedirse de ellos hasta el próximo encuentro. Al momento de decir la consigna dos niños se sentaron y me comentaron que no querían participar. Hecho que respeté. Durante la canción, me aproximé a uno de ellos con los brazos abiertos preguntándole con la mirada si podía acercarme a abrazarlo. Y me dejó. Y para mi satisfacción, no solo me dejó sino que correspondió al abrazo... y al momento siguiente, salió por la clase con los brazos abiertos para abrazar a otros compañeros... y su amigo, que estaba a su lado sentado, al ver su reacción... se levantó también y se unió a los demás. 
La respuesta fisiológica en un abrazo viene dada por la presión intensa que uno recibe en el cuerpo, que puede llegar a disminuir el ritmo cardíaco, el pulso, el metabolismo y el tono muscular, funciones que están controladas en nuestro organismo por el Sistema Nervioso Simpático. Genera una sensación tranquilizadora, disminuyendo el ritmo respiratorio pero aumentando la profundidad de la respiración, provocando la relajación por liberación de oxitocina.

Según la Wikipedia, la Oxitocina, entre otros efectos sobre el comportamiento, produce el incremento de los lazos maternales. El aumento de confianza y la reducción del miedo social.  

Este hecho del niño levantarse y animarse a participar en la propuesta, por la percepción placentera de su propia vivencia, para mi es MI REGALO. 
Aunque aparentemente a veces uno no quiera, uno lo necesita. Y la maravilla de trabajar con niños es que las respuestas se ven a modo inmediato. No hay tanto cuestionamiento. Es "me gusta, me sienta bien, lo hago". Aunque de un principio el pensamiento le dijo que era mejor no participar, por la vergüenza o por el motivo que fuera, la sensación gratificante de dar y recibir un abrazo le hizo automáticamente rectificar el rumbo y entregarse al placer de lo que estaba experimentando. 

Realmente ellos no paran de enseñarme a aprender. 


UN ABRAZO!






1 comentario:

  1. Gracies estimada. Sempre és grat escoltar-te. Endavant! Sempre endavant!!!

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